SAGRADA FAMILIA-C

lunes, 24 de diciembre de 2018

30 DICIEMBRE 2018
SAGRADA FAMILIA-C

2 comentarios:

Paco Echevarría at: 26 diciembre, 2018 00:00 dijo...

LA FAMILIA (Lc 2,41-52)
El domingo siguiente a la Navidad se dedica al recuerdo de la familia de Nazaret y se nos ofrece la oportunidad de reflexionar sobre una institución de gran importancia tanto a nivel individual como social. No decimos nada nuevo si afirmamos que hoy la familia -en cuanto institución- está en crisis. Y son muchas las manifestaciones de la misma: crece el desafecto -los adultos saben que sus hijos no los cuidarán cuando sean ancianos-; decrece la autoridad paterna -¡No puedo con mis hijos! es una expresión bastante frecuente-; se teme el compromiso ante las instituciones -parejas de hecho de duración limitada-; se duda de la capacidad de asumir un compromiso definitivo -aumento de los casos de divorcio y separación- y, sobre todo, se ha perdido la valoración de la familia como espacio de creación de la vida -hijos extramatrimoniales, madres de alquiler...-. La disminución del número de hijos hasta el punto de que cada día es más "normal" el hijo único, traerá como consecuencia directa inmediata que muchos niños y niñas crecerán sin experimentar el sentimiento de la fraternidad que es un poderoso aliado contra el egoísmo.

La pregunta que nos asalta es: Esta crisis ¿significa un progreso o, por el contrario, es una pérdida? Con la caída de la familia, la sociedad y el individuo ¿gana o pierde? Podemos formular la pregunta de otra forma: ¿necesita un niño las referencias familiares -padres y hermanos- para lograr un desarrollo sano y equilibrado? La experiencia parece inclinarse a favor del sí. Otro tema es la incidencia que tiene en la vida del individuo una estructura familiar irregular -padres alcohólicos, violencia, etc-. Pero esto viene a confirmar lo que decimos. Si la estructura familiar puede condicionar poderosamente -en favor o en contra-, es que la familia es importante y el hecho de que influya negativamente en caso de ser irregular no significa que la institución familiar no sirva, sino que debe mejorar.

La familia es una institución que tiene milenios y ha sobrevivido a todos los cambios que el tiempo impone. Si hoy está en crisis, no es porque esté desfasada, sino porque el ser humano está en crisis. La crisis que padecemos es una crisis global. Está en crisis nuestro modo de entender la vida, el mundo que hemos construido. Hemos comido de la fruta prohibida creyendo que íbamos a ser dioses y, al despertar, nos hemos visto fuera del paraíso. Todo sufre las consecuencias de esa decepción y la familia no podía escapar.

Pero de algo estamos seguros: la salvación de la sociedad vendrá por la regeneración de los individuos y la regeneración de los individuos, por la recuperación de la familia como lugar privilegiado para el nacimiento y desarrollo de la vida. Quienes en su día la atacaron so pretexto de modernidad actuaron de un modo inconsciente e irresponsable porque no midieron las consecuencias de sus planteamientos

juan antonio at: 26 diciembre, 2018 20:15 dijo...

Este día tenemos que mirar a Jesús, José y María, como una familia, el padre, la madre y el hijo, que observantes de la ley, acuden a Jerusalén por la Pascua y en esta celebración, Lucas nos narra la pérdida de Jesús, no sólo del grupo sino de su familia.
Esta celebración nos obliga a una reflexión sobre lo que hoy queremos entender o algunos o muchos quieren entender por familia.
Ya no se trata de un hombre, una mujer y los hijos de ambos dentro de un entorno familiar y social.
Hemos hecho de la familia algo tan especial, por llamarle de alguna forma educada, que todo es familia, hasta la no familia, es decir lo que yo quiero es familia, aunque no lo sea, pero yo y siempre yo, sin más referencia, al menos natural, llamo familia a lo que se me antoje yo y lo que se le pide a los legisladores para que de alguna forma ese “yo” adquiera fuerza social.
Es la familia a la carta, o sin carta. Tengo una sobrina que hablando su madre de que no entendía eso de pareja de hecho, matrimonio civil, matrimonio de igual sexo…. Y le dice, mira mama, las parejas de hecho y todas esas cosas, se escriben con lápiz, que luego no interesa, se coge la goma de borrar y se borra; la de verdad se escribe con bolígrafo o pluma que no se puede borrar.
Se habla de crisis del matrimonio y efectivamente la hay, y yo siempre me hago la pregunta si esa crisis no viene derivada del concepto de persona que la sociedad actual tiene, pues qué entendemos por persona, le damos la dignidad que Dios le concedió sobre todas las cosas, como nos dice el salmo número ocho ¿qué es el hombre para que te acuerdes de é, poco inferior a ,los ángeles lo hiciste, le diste el mandos sobre la creación…..
Esa es la persona que como tal es relacional, que sale de sí y crea pareja, sociedad, Iglesia, pero llena de dignidad, lo más grande de la creación, ¡tanto, tanto, que hasta Dios se hizo carne de nuestra carne!
Hoy se desprecia al hombre/mujer, piso a quien sea con tal de escalar los puestos influyentes de la sociedad, se humilla, se olvida, se ningunea y se llega hasta matar. ¿Dónde están las niñas prostituidas, obligadas a casarse (niñas), los niños de la guerra, los que se usan en el narco porque no son punibles…? y así la lista sería casi interminable.
Busquemos y vivamos con nuestra familia, sobre todo con los más débiles y que hoy se quitan de en medio porque nos estorban o lo traemos a casa porque vivimos con su pensión.
Acordémonos de todos, estemos con todos, volvamos a ser familia, piñas, racimos de uvas apretás, fruto de ese amor que nos une a grandes y pequeños y vivamos los días que el Padre nos regale guardando todas nuestras vivencias en nuestro corazón.
Santa María, Madre de Dios y Madre nuestra, enséñanos a ser y vivir en familia como Tú lo viviste, con silencio y corazón dispuesto, AMEN