DOM-27C

sábado, 24 de septiembre de 2022
DESCARGAR

2 comentarios:

Juan García Muñoz at: 26 septiembre, 2022 21:34 dijo...

Soy Juan García y quiero expresar mi profundo agradecimiento por el bien que hacéis con vuestros comentarios. Ultimamente hay un anónimo o anónima que transmite la bondad de Dios con profundidad y sencillez. Mil gracias. Espero conocerla algún día.

Maite at: 28 septiembre, 2022 22:04 dijo...

Todavía hoy, oímos ponderar la gran fe de algunos, como si en el tamaño estuviera la calidad. Y ante las pruebas y vaivenes de la vida, todos, qué duda cabe, deseamos una fe grande, lo más grande posible, creyendo que así la noche que atravesamos será menos oscura.

Pero Jesús nos recuerda en el evangelio, una vez más, que basta con tener fe; aunque sea una fe pequeñita. Basta con una chispa, una lucecita para traspasar la oscuridad de un túnel, para socavar la pared de una duda. Para encontrar la fuerza para servir sin buscar nada a cambio, ningún mérito ni ganancia en ello; por compromiso, por responsabilidad, por convicción.

Como Timoteo, cuando es exhortado por Pablo para ser servidor del Evangelio pase lo que pase. O Habacuc, profeta a su pesar.

El salmista nos invita a escuchar hoy, y todos los días, la voz del Señor; a no endurecer el corazón. Con una fe pequeñita podemos reconocer en Dios a nuestra roca, para agarrarnos y mantenernos firmes; asidos al que nos reconoce como pueblo suyo.